MIRADAS

Cautivas mi atención y sólo puedo mirarte. Lo hago desde la distancia y el respeto, con la prudencia y al mismo tiempo la avidez de quien tomaría tu esencia por un instante para tratar de descubrir por qué llamas mi atención. Será por cuanto tienes que decir a mi corazón para motivar mi arte en ascuas.

ALGO NUEVO ESTÁ AHÍ

Y en el día a día, como inesperado, surge algo nuevo que no sé como explicar y menos aún expresar. Lo hace como un soplo de aire que invade el entorno y refresca fragmentos resecos de realidad, tomando como referencia esos matices casi perdidos que vuelven a tener sentido. Gracias por el comentario sincero, la ilusión de una sonrisa novedosa y positiva, la paciencia de observarme, leerme, escucharme en el arte y la fotografía que con humildad presento tan sólo para mostrar una nimia porción de mi corazón.

POSADO OCULAR

Fue un instante de confianza. Una mirada fija, apenas unos segundos de entrega al posado ocular que la cámara solicitaba del ojo anónimo y su entorno. Resta como vigilante de todo el blog, tal vez como reclamando atención desde la retina fija y sus complementos, quizá indiferente al espectador pero dispuesta a lo eterno que asegura una atención visual perpetua.

FIEL Y ANTIGUO COMPAÑERO

Transita una calle anónima en el viejo barrio con la compañía del fiel y antiguo compañero. Mirada perdida, inmerso en su personal historia, ajeno al mundo y a la memoria de su propio pasado.

ORIFICIOS

 

Por ellos entran y salen las ideas, el aire, los desahogos, las ilusiones. Por ahí se desfoga el ímpetu y se rellena de serenidad el descontrol de una salida de tono. Siempre tienen que estar accesibles, interconectados y receptivos porque todo lo que puede pasar a través de ellos es imprevisible: si se atascan estamos perdidos.

SIN SALIDA

Ciertamente alguien diseñó este conjunto artístico combinando elementos muy variados. Muy bonito, así es. Pero si de pronto despertara y me encontrara allí arriba, no sé si sabría hallar la salida. Tal vez hacia el cielo...

CORTINAS

 

No ocultan nada más que piedra sin historia, que les sirve de tapiz para embellecer la fontana pública que las sustenta y que a través de ellas observa paseos entrañables de anónimos transeúntes.. Son cortinas de cascada sin recorrido, vidas cortas que aún así tienen sentido.

COLEGAS

Son sinceros, leales y legales. Ésos que miran en la dirección que el otro propone porque están en la misma onda. Siempre disponible, a corazón abierto y en tantas ocasiones bombeando estima y entusiasmo según necesite uno u otro. Son colegas, más que amigos. Y yo tengo de ésos. Para ti, que eres uno de ellos. Para todos los que sintonizan con este perfil.

ESPACIOS COMUNES

Resulta imaginable que se trata del espacio esencial del auditorio, un lugar que espera ser ocupado en breve y cuya ubicación será elegida con detalle por algunos privilegiados entendidos de su valor estratégico. Pierde importancia vital lo que ocurra en el escenario, porque esas localidades acogerán a personas diversas con intereses comunes y así, por un tiempo definido, confluirán entes físicos y mentes ávidas del espectáculo, conferencia o actividad artística que les haya convocado. Ahí está la clave, porque casi seguro no jamás volverán a reunirse esas personas en ese lugar o en otro similar: así es la vida de sorprendente y así somos los seres humanos de impredecibles.

Nota al margen: fotografía cedida por K-ta Salguero.

ESPERANDO PLANTADA

Cuando salió del taller en un gran camión y atravesó Valencia hasta el cruce de Sueca-Literato Azorín, la gran niña fallera no sabía que eso iba a ser tan aburrido. LLegó junto con muchos otros y fue ubicada enseguida; pero luego pasaron horas y más horas hasta que se hizo de noche y nadie le dijo hasta cuándo. Artistas, operarios, grúas, luces y ruidos muy diversos a su alrededor, pero sin hacerle ni caso mientras esperaba plantada. Ella no sabía que, una semana después de ser alumbrada por la mejor iluminación de Valencia, ambientada con música festera, visitada por miles de curiosos, falleras y falleros, turistas y expertos, pasaría a formar parte de la historia de Valencia en Fallas tras un ritual de fuego que por esas fechas inmortaliza ese ciclo anual para poder comenzar el siguiente un instante después.

COMUNICANDO O TODO LO CONTRARIO

Pues yo no llevaba el móvil en la mano sino la cámara. El caso es tener las manos (o al menos una) ocupadas, pero vino bien para captar un instante comunicativo estelar.

Surgen varias cuestiones: ¿se conocían, se echaban de menos, uno llamaba al otro y enseguida conectaban? ¿Tal vez uno se informaba de la temperatura ambiente de aquella callejuela del centro histórico y la otra se dejaba guíar por el gps de su aparato?


Hubiera sido interesante fijar mi atención en sus ojos, su semblante, tal vez pedirles la hora o el nombre de una calle cercana como turista extraviado, darle los buenosdías o desearles -por separado- feliz paseo por la ciudad. Pero he de concluir que en estos tiempos cada vez cuesta más extrovertir mente y corazón para ser alguien sociable, empático o al menos disponible en cierta medida para un viandante cualquiera que precise una porción de tu supuesta amabilidad (a falta de simpatía). No me dieron opción y yo tampoco creí que fue una buena idea sacarles de su hipnótico universo.

LUJO Y ENCANTO PARA LA NOCHE DEL CENTRO

Si te fijas en la matrícula del vehículo puedes pensar que se trata de un reportaje a la antigua de la veterana televisión británica. En la puerta de un céntrico hotel de lujo con la entrada congestionada, el minibus sobre la acera destacaba por su encanto y un cicerto misterio en la noche.


 Luego me informé bien y cualquiera puede alquilarlo para una ronda nocturna, con chófer e incluso acompañantes dinámicos que aporten a la madrugada una pizca de picante o sensación exitosa.

No era momento de husmear más y me quedé con el impacto visual que aquí pretendo reproducir en breve. ¡ Vaya nochechita !

ARTE EN EQUILIBRIO

Varios semáforos antes nadie podía imaginar la secuencia de vida que iba a presentarse antes los conductores en ese punto estratégico; bueno, tal vez no fuera el caso para los usuarios habituales de ese paso entre la vuelta del Marítimo, el centro de la ciudad  y la salida hacia el norte de España por la costa.

Ciertamente me impactó contemplar una muestra arte callejero aderezada por una combinación de equilibrio entre malabarismo, necesidad, gracia y descaro. Sentí ganas de bajar a probar la experiencia y seguramente el artista me hubiera regalado medio minuto de clase prática gratuita sobre el asfalto caliente en la transición de colores de los semáforos. Confieso que renuncié por las prisas que siempre nos atenazan, el temor al ridículo -que ese hombre perdió en su adolescencia- y por el compromiso vital ante la futura adicción si lo hubiera probado y por casualidad llega a gustarme.

CANTAR Y BAILAR AL SON DE LA CRISIS

Varios  miles de personas disfrutaban de una fiesta de "ronda" en homenaje a la Virgen en la plaza de su nombre. Prensa gráfica, televisión, autoridades y mundo valenciano en general. Una secuencia de música de banda, bailes, orfeón, escolanía mariana y el colofón siempre esperado con tenor y soprano de máximo nivel.

Falló un detalle que permaneció a la vista toda la velada. En tiempos de crisis el presupuesto municipal tal vez no dio para subsanar a tiempo la deficiencia del punto más mediático del escenario más musical. Me siento confuso, aunque no sé explicarlo.

DESCONEXIÓN REAL

Parece que este sitio web sea una ventana a las denuncias callejeras, pero no ése el plan.

Un avezado fotógrafo aficionado me ha enviado este regalo y realmente siento que...¡llamarmiatenciónespoco!

En esta ocación se trata de reflexionar sobra la vida y desventuras de un viejo televisor de tubo, como los de siempre. Tal vez no ha sido capaz de mantener por más tiempo su estilo, modelo y vigencia; seguramente ya no conectaba con el público familiar o global que le dio vida por tiempo sin control. Lo que ya no está tan claro es que haya aparecido esta mañana junto a los contenedores municipales a la puerta de un colegio público.

fotografía de Vicente Almenar

Descrito aquí el hecho y constatado el peligro provocado por una mente insensible, concluyo que es posible que algún "manitas" lo hubiera recogido, trasladado y reparado en pocas horas. Pero el viandante que lo descubrió pudo certificar con su acertada fotografía que ahora sólo puede servir para decorar algún antro de gente desesperada por mostrarlo como arte de..."que cada cuál le ponga un nombre cuanto más raro mejor, que ahora todo cuela".

RESTO DE UN NAUFRAGIO

Un parque público resulta un lugar interesante para observar el sentimiento cívico del ser ciudadano. Dejar ignorados al pie de un banco desperdicios variados te permite analizar conductas y plantearte ciertas dudas. ¿Estaba solo/a o acompañado/a por uno o varios elementos humanos afines o consumió hasta el hartazgo probando marcas y sabores en humo y alcohol, mientras protegía su piel a la vista con crema solar?

Aquel/lla protagonista anónimo/a, ciertamente ajeno/a a la ecología, la educación y cualquier norma de comportamiento en convivencia, dejó a mi paso algo así como el resto de un naufragio personal que tal vez fuera lo más habitual en su devenir. No juzgaré la opción tomada, pero hace años que no me quito de la mente esta imagen que recuerdo cada vez que paso - y es a menudo - por ese parque y ese banco solitario.

¡ VIVA EL RECICLAJE !

¿Qué pueden tener en común un inodoro verde, un colchón azul y una puerta con un montón de escombros? Correcto: la respuesta es "un contenedor en la acera de una calle céntrica de la ciudad".

 Sin duda es una gran ocasión para contarse, en la intimidad de una mañana soleada con viandantes igrorando -incluso tal vez despreciando - su presencia cerca de la City valenciana, cómo les fue en su hogar recién liquidado y reducido a una última reunión de elementos esenciales ahora inservibles a todas luces.

Espero que haya reciclaje final como manda la normativa, pero ¡ vaya aspecto presentaba la tienda de compras caras que lucía ante su puerta semejante detalle de nula urbanidad !

NO ES SÓLO CRUZAR “EN ROJO”

No importa la edad, raza, credo o condición. Las reglas que nos damos para convivir tienen prioridad, porque de otro modo… ¡para qué tenerlas!  No solamente se ignoran en la calzada, sino que pierden la ocasión de sentirse unidos en la tropelía de cruzar sin permiso: rojo es a la vez señal negativa, de peligro y la vergüenza de no respetar lo pactado. Y realmente es bastante habitual…pobre semáforo ignorado.

MENSAJE CIFRADO

El mensaje con sugerente oferta sólo podía leerse en dirección contraria, pero la moto sobre la acera y su espejo dejaron claro que la vida está hecha de detalles con reto incluído.

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 Descifrarlo ya fue otro cantar: al fin y al cabo era para gastar más.

CONSUMIDA COMERCIAL

De entre la clientela del centro comercial hallé plenamente realizada en su papel a esta dama anónima. Claramente ella llegó para consumir, como provoca la sibilina publicidad y asimismo concede tantas veces el ansia por desahogarse de no sé sabe qué tristeza o incomprensión universal; una vez satisfecha, trató de volver al mundo común y, consumida, quedó atrapada entre la realidad y la ficción, en una toma congelada en el tiempo. Problablemente allí seguirá. Ahí es la vida.

PISANDO MUY FUERTE

Tipos de calzado, diversidad de gustos. Tanto en el asfalto como en las aceras, la ciudad muestra sin rubor múltiples opciones para vestir los pies. De ese modo las extremidades inferiores del cuerpo humano son una referencia de gusto, condición social, atrevimiento, incluso de apuesta irreflexiva. La confluencia de estilos, colores, matices; el modo de apoyar en reposo, iniciando un trayecto e incluso al caminar, muestran lo diferentes que somos y cómo cada cuál asume opciones personales que darían base a debates sin fin; unos por moda, otros copiando estilo, algunos según los clásicos, distintos y a la vez revueltos. Siento que la clave está en tener la cabeza – la mente – abierta y los pies – no hablo del calzado – en el suelo. Para gustos, alturas y pisadas.

SIEMPRE HAY UNA SALIDA

 El muro hermético del edificio del futuro no era tal. Se abrió en él una grieta al pretender compararse con el cielo. No se sabe si perdió fragmentos de personalidad, pero al menos dejó al descubierto un espacio de flaqueza. Las estancias de la eternidad no tendrán ventanas, será todo compartido.

AQUÍ ESTAMOS

Por fin. Tras años de dudas y deseos, nace un espacio singular donde sólo cabe crecer y respirar hondo. No desvelaré en esta primera entrada todo lo que hará posible este sitio web, pero es justo y necesario aportar alguna luz para que los pocos que puedan llegar aquí no pierdan el interés a las primeras de cambio.

Fascinado por el entorno, no dejo de fijarme en todo lo que acontece. En el campo, la playa o la ciudad siempre hay algo que reclama mi análisis, interiorización y comentario puntual. Yo soy así. Que una situación o momento despiertan mi interés, pues allí me quedo; aunque siga caminando o siguiendo la ruta en coche, bus, bici, etc.

Pero hay un nivel superior en este instinto perceptivo que mora en mis genes. Se trata de todo aquello que -dicho sin mayor pretensión- "llamar mi atención es poco". 

Todo eso que considero inclasificable, que si no cuenta con una reflexión personal + imagen queda en mi órbita durante un tiempo que no preciso para almacenar en las estancias de mi orden racional, todo tendrá cabida en este blog.

Bienvenido y bienhallado, estimado visitante (hombre o mujer, no importa edad, raza, condición o creencia).

Juntos iremos más allá de la duda existencial: la vida es breve, pero mucho más que interesante. Llamar mi atención es poco.